Las polillas Bogong realizan una migración de cientos de kilómetros guiándose por el firmamento
Cada primavera, miles de millones de polillas Bogong emprenden una extraordinaria migración hacia las montañas australianas, recorriendo cientos de kilómetros para refugiarse en frescas cuevas alpinas. Lo sorprendente es cómo encuentran el camino. Según un estudio publicado esta semana en la revista Nature, estas polillas utilizan el cielo estrellado como brújula. Son el primer invertebrado del que se ha demostrado científicamente que navega guiándose por las estrellas.
Los investigadores capturaron polillas silvestres y las colocaron en un simulador de vuelo donde podían manipular tanto el campo magnético como el cielo visible. Al eliminar uno de estos elementos, las polillas seguían siendo capaces de orientarse correctamente, siempre que tuvieran acceso al otro. Pero al quitar ambos, se desorientaban por completo. Esto indica que combinan un "compás" visual basado en las estrellas y uno magnético, lo que les permite volar incluso en condiciones difíciles como cielos nublados o tormentas magnéticas.
Podéis leer más en este artículo divulgativo que ha publicado Nature junto al estudio o también en medios como EFE Verde o El Diario.
